Lxs del Camino

Espacio ecuménico popular de promoción y lucha por los derechos de todos los géneros.

Entre los objetivos generales que nos hemos es “Trabajar activamente en la lucha por los derechos humanos (desde su integralidad) y en la profundización de la democracia” y “abrir y/o participar en espacios que promuevan la igualdad de género, diversidad y clase”. Estos ejes junto con nuestras ansias por la igualdad, un largo debate y una mirada teológica inclusiva-liberadora, nos han creado la necesidad de abrir e ir construyendo un espacio ecuménico abierto, al que denominamos LXS DEL CAMINO. POR QUÉ LXS DEL CAMINO? Tomando como punto de partida el libro de los Hechos, “Los del Camino” es el nombre que se le dio a lxs primerxs seguidorxs del movimiento popular de Jesús. No se lo veía como una religión más, sino como una nueva manera de vivir la vida, iluminada por la certeza de la salvación/liberación. Lxs mismos abrazaron e hicieron suya la propuesta liberadora de Jesús: el Reino de Dios desde lxs pobres y para lxs pobres, que al mismo tiempo tenía dos características: el antiimperialismo y la organización popular para lograr la liberación de toda opresión (Hechos 9:2; 19:9; 19:23; 22:4; 24:14).

Denominamos así este nuevo espacio porque reconocemos que el problema de la sociedad actual y a lo largo de su historia han sido y son: el patriarcado (por su carácter jerárquico, que coloca en el centro lo masculino como principio de organización social, cultural, política y religiosa) y el capitalismo (sistema económico, donde el capital prevalece sobre el trabajo, donde la propiedad privada y el libre comercio son dos bases elementales), productos de siglos de colonialismo, neocolonialismo e imperialismo.

Por esta razón, “Lxs del Camino” aspira todos los días a ser un espacio de organización popular, donde hermanadxs en la fe, abrazadxs por el amor y el evangelio radicalmente inclusivo de Jesús y los ejemplos de lucha de historicxs militantes por la igualdad, sigamos empujando los límites de lo posible, soñando, trabajando y luchando: “Por un mundo donde seamos socialmente iguales, humanamente diferentes y totalmente libres.” Rosa Luxemburgo.

DECÁLOGO POR LA IGUALDAD
1. Violencia de género(s) Contribuir con voz profética a la condena y denuncia de todo tipo de violencia, sea ésta física, verbal, psicológica, laboral, económica, sexual, simbólica, institucional o religiosa; sobre cualquier persona por su condición sexual y/o identidad de género.
2. Soberanía de lxs cuerpxs Promover y concientizar sobre la capacidad y derecho a decidir sobre nuestra salud sexual y reproductiva; sobre nuestras vidas y nuestros cuerpxs.
3. Educación Trabajar por la unidad, organización y movilización de toda la comunidad educativa que camine en pos de ser efectivamente pública, laica, gratuita, de calidad y no sexista, que garantice la efectiva implementación de la ESI para todas las personas.
4. Tierra Promover y concientizar sobre el derecho humano y constitucional que tienen nuestros pueblos cada a una vivienda digna, adecuada y saludable; el derecho a vivir en el territorio que se elija y de compartir la tierra como medio de producción y de vida.
5. Salud Promover y concientizar sobre el derecho a la salud contemplada de manera integral (tomando en cuenta el ámbito psicosocial) y a un sistema que sea efectivamente público, universal, inclusivo, gratuito y de alta calidad para todas las personas, en el que no exista discriminación alguna.
6. Cultura Trabajar y defender el derecho a la Cultura, que incluye conocimientos, saberes populares, creencias, arte, costumbres y todas las demás capacidades y hábitos que todas las personas merece compartir como parte de la sociedad y en sus territorios.
7. Trabajo Promover y concientizar sobre el derecho al trabajo – derecho fundamental – que todas las personas tienen, a la libre elección del mismo, a condiciones equitativas y dignas. A la protección contra el desempleo, a la igualdad salarial, sin discriminación; al salario digno, la protección social y a una sindicalización que lxs represente.
8. Participación política y social Promover y empujar la participación equitativa, el protagonismo igualitario de todas las personas en los ámbitos de poder políticos (Ejecutivo, Legislativo, Judicial) y en el religioso; la referencialidad no sexista en los partidos políticos y en toda organización popular, sin privilegios ni discriminación por sus sexualidades y/o identidades genéricas.
9. Espiritualidad popular Desde nuestra identidad cristiana, evangélica, pentecostal, ecuménica, latinoamericana y feminista reconocemos las religiosidades y espiritualidades de nuestro pueblo, los símbolos que construyen y la identificación popular con lxs sujetxs que en la historia han dejado huellas en su lucha, solidaridad y entrega en el amor al prójimo.
10. Unidad y articulación No hay una palabra tan relevante, urgente y necesaria de ser vivida como es la UNIDAD: unidad en el Espíritu: con Dios/a y la enorme comunidad de creyentes y personas de buena voluntad que aman la vida, con el pueblo históricamente sufriente y empobrecido por los mismos de siempre. Esa unidad nunca debe significar el aniquilamiento de la diversidad/disidencias, ni la imposición del pensamiento único, sino la aceptación y la voluntad de sentarnos a la mesa y poner todos los dones, capacidades y talentos al servicio de lxs olvidadxs. Una sociedad verdaderamente justa, donde personas nuevas no se construyan pisoteando dignidades. Es por ello que la unidad nos conduce, nos prepara y hace posible la salvación/liberación en todos los órdenes de nuestras vidas y nuestros pueblos.