Chile. Condenan a 7 expolicías chilenos por el asesinato del joven mapuche Camilo Catrillanca
El Tribunal Oral en lo Penal de Angol declaró al excarabinero Carlos Alarcón culpable de homicidio por efectuar los disparos que provocaron la muerte del joven mapuche Camilo Catrillanca en el sur de Chile, mientras que el resto de involucrados fueron condenados por apremios ilegítimos, obstrucción a la investigación o disparo injustificado, entre otros delitos.
El juicio, que comenzó en marzo y se retomó en octubre tras un parón por la pandemia, reunió a intervinientes de una decena de instituciones, más de 70 testigos y se extendió durante 37 jornadas, que culminarán con la lectura de las penas el próximo 28 de enero.
Los hechos tuvieron lugar el 14 de noviembre de 2018 en medio de un procedimiento policial liderado por el Comando Jungla -un equipo que el Gobierno instaló en la región y que está destinado a perseguir, amedrentar y asesinar a los mapuche-, cuando una bala alcanzó a Catrillanca mientras viajaba en tractor junto a un adolescente.
El caso, marcado desde el comienzo por las irregularidades y las versiones contradictorias de los condenados, hizo temblar los cimientos del cuerpo de Carabineros, que inicialmente mintió diciendo que los agentes habían sido emboscados y que el vehículo de Catrillanca se había cruzado en el tiroteo.
El peritaje de la Fiscalía, sin embargo, demostró que esta versión era falsa y Alarcón, el autor del disparo, admitió luego que el abogado imputado, Cristián Inostroza, les indicó que entregaran una versión falsa de lo acontecido.
«Las pruebas del juicio establecen que idearon de forma previa una estrategia de ir a declarar a la Fiscalía y, en definitiva, aportaron falsos antecedentes a la investigación», sentenció el juez Francisco Boero.
El montaje policial
En un comienzo, Carabineros negó la existencia de unas grabaciones tomadas por la cámara que uno de los agentes portaba en el casco y que semanas después se difundieron por los medios locales.
El vídeo muestra que Catrillanca recibió disparos de un fusil de guerra y, tras el impacto, permaneció varios minutos inmóvil en el asiento del tractor.
La controversia del caso le costó el cargo al entonces general director de Carabineros, Hermes Soto, y puso en jaque el puesto de quien era ministro del Interior, Andrés Chadwick, al que se le acusó de defender la versión falsa de los hechos.
El asesinato de Catrillanca fue el primer gran mazazo al Gobierno de Sebastián Piñera y empañó los planes del Ejecutivo, que poco antes del crimen había anunciado el «Acuerdo Nacional por el Desarrollo y la Paz en La Araucanía», un polémico tratado que bajo el lema de «amainar la conflictividad», significaba la militarización de la Araucanía para perseguir al pueblo mapuche garantizando los negocios de los empresarios forestales y terratenientes.
Es por esto que si bien el tribunal de Angol anunció que Carlos Alarcón, exsargento de Carabineros es declarado culpable de homicidio simple consumado y de homicidio frustrado, los verdaderos autores políticos de la intervención y represión hacia la comunidad mapuche aún siguen impunes. Ellos son el mayor de Carabineros Manuel Valdivieso y el ex ministro del Interior y Seguridad Pública Andrés Chadwick (UDI), quien fortaleció la represión en La Araucanía con la intervención del «Comando Jungla». Todo avalado por el presidente Sebastián Piñera.
Fuente: laizquierdadiario.com