🇬🇹 Como Iglesia Pentecostal Dimensión de Fe en IADLA y desde todas nuestras construcciones territoriales conmemoramos este 26 de abril el aniversario del martirio de Monseñor Juan José Gerardi Conedera, 𝘀𝗮𝗰𝗲𝗿𝗱𝗼𝘁𝗲 𝗴𝘂𝗮𝘁𝗲𝗺𝗮𝗹𝘁𝗲𝗰𝗼, 𝗰𝗼𝗺𝗽𝗿𝗼𝗺𝗲𝘁𝗶𝗱𝗼 𝗰𝗼𝗻 𝗹𝗮𝘀 𝗹𝘂𝗰𝗵𝗮𝘀 𝘀𝗼𝗰𝗶𝗮𝗹𝗲𝘀 𝗱𝗲 𝘀𝘂 𝘁𝗲𝗿𝗿𝗶𝘁𝗼𝗿𝗶𝗼.
🇬🇹 Monseñor Gerardi fue asesinado en 1998, tan sólo dos días después de presentar el histórico 𝗶𝗻𝗳𝗼𝗿𝗺𝗲 𝗚𝘂𝗮𝘁𝗲𝗺𝗮𝗹𝗮: 𝗡𝘂𝗻𝗰𝗮 𝗠á𝘀. Esta obra esencial en la lucha por justicia para el pueblo, coordinada por la Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado (ODHA), documentó miles de violaciones a los Derechos Humanos durante el conflicto armado interno y señaló con claridad a responsables del Estado guatemalteco. S𝘂 𝗮𝘀𝗲𝘀𝗶𝗻𝗮𝘁𝗼 𝗻𝗼 𝗳𝘂𝗲 𝘂𝗻 𝗰𝗿𝗶𝗺𝗲𝗻 𝗰𝗼𝗺ú𝗻, 𝘀𝗶𝗻𝗼 𝘂𝗻 𝗮𝗰𝘁𝗼 𝗯𝗿𝘂𝘁𝗮𝗹 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝘀𝗶𝗹𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮𝗿 𝗹𝗮 𝘃𝗲𝗿𝗱𝗮𝗱.
🇬🇹 La muerte de Gerardi 𝘀𝗶𝗺𝗯𝗼𝗹𝗶𝘇𝗮 𝗲𝗹 𝗰𝗼𝘀𝘁𝗼 𝗱𝗲 𝗮𝗹𝘇𝗮𝗿 𝗹𝗮 𝘃𝗼𝘇 𝗽𝗼𝗿 𝗹𝗼𝘀 𝘀𝗶𝗻 𝘃𝗼𝘇. Su martirio, como el de miles de hermanxs y compañerxs en el continente, está directamente vinculado a su compromiso con la Justicia y la Memoria. El intento de acallar su denuncia revela la profundidad de una impunidad que aún persiste en el país hermano. Aunque se lograron condenas históricas por su asesinato, muchos cabos quedaron sueltos y sectores poderosos siguen evitando la verdad.
🇬🇹 A 26 años, su legado interpela nuestra conciencia colectiva: ¿es posible una verdad sin justicia? 𝗟𝗮 𝗷𝘂𝘀𝘁𝗶𝗰𝗶𝗮 𝗿𝗲𝘀𝘁𝗮𝘂𝗿𝗮𝘁𝗶𝘃𝗮 𝘀𝗲 𝘃𝘂𝗲𝗹𝘃𝗲 𝗲𝘀𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮𝗹, no sólo como castigo para los culpables, sino como un camino hacia la reparación a las víctimas basada en la verdad, la justicia y el compromiso de no repetición.
🇬🇹 Su voz sigue viva en el pueblo guatemalteco que lucha a diario por su dignidad y 𝘀𝘂 𝗰𝗹𝗮𝗺𝗼𝗿 𝗽𝗼𝗿 𝘂𝗻 «𝗡𝘂𝗻𝗰𝗮 𝗠á𝘀» 𝗻𝗼𝘀 𝗹𝗹𝗮𝗺𝗮 𝗵𝗼𝘆 𝗰𝗼𝗻 𝗺á𝘀 𝘂𝗿𝗴𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮 𝗾𝘂𝗲 𝗻𝘂𝗻𝗰𝗮.