La Obispa Gabriela Guerreros disertó en el IX Congreso Latinoamericano de Género y Religión

🏳️‍🌈🏳️‍⚧️ Nuestra Obispa Gabriela Guerreros llamó a “enseñar y aprender colectivamente a vivir en dignidad”, un propósito al que caracterizó como “una escuela que no tiene graduación final” porque “cada generación debe seguir aprendiendo a ser libre”.

🏳️‍🌈🏳️‍⚧️ En su disertanción en la mesa 𝗟𝗮 𝗵𝗶𝘀𝘁𝗼𝗿𝗶𝗮 𝗰𝗼𝗺𝗼 𝘂𝗻 𝗽𝗿𝗼𝗰𝗲𝘀𝗼 𝗽𝗲𝗱𝗮𝗴ó𝗴𝗶𝗰𝗼: 𝗹𝗮 𝗰𝗼𝗻𝘀𝘁𝗿𝘂𝗰𝗰𝗶ó𝗻 𝗱𝗲 𝗱𝗲𝗿𝗲𝗰𝗵𝗼𝘀 𝗲𝗻 𝗲𝗹 𝗰𝗮𝗺𝗽𝗼 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗱𝗶𝘃𝗲𝗿𝘀𝗶𝗱𝗮𝗱 𝗱𝗲 𝗴é𝗻𝗲𝗿𝗼 𝘆 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗱𝗶𝘃𝗲𝗿𝘀𝗶𝗱𝗮𝗱 𝘀𝗲𝘅𝘂𝗮𝗹,  una de las actividades del 𝗜𝗫 𝗖𝗼𝗻𝗴𝗿𝗲𝘀𝗼 𝗟𝗮𝘁𝗶𝗻𝗼𝗮𝗺𝗲𝗿𝗶𝗰𝗮𝗻𝗼 𝗱𝗲 𝗚é𝗻𝗲𝗿𝗼 𝘆 𝗥𝗲𝗹𝗶𝗴𝗶ó𝗻, que concluyó esta tarde en Puerto Alegre, Brasil, nuestra Obista señaló que “una teología feminista y queer nos ofrece claves complementarias” para enfrentar aquellos desafíos. 

🏳️‍🌈🏳️‍⚧️ “Marcella Althaus-Reid -añadió- nos recuerda que el cristianismo liberador no puede ignorar los cuerpos disidentes ni los deseos queer, pues la teología de los pobres también debe ser teología de las sexualidades marginalizadas. Ivone Gebara insiste en que el lugar de Dios se encuentra en los cuerpos heridos y en las luchas por dignidad, no en los altares de la normatividad patriarcal”. 

🏳️‍🌈🏳️‍⚧️ Inspirada en esas perspectivas, Guerreros ponderó a “la pedagogía espiritual que no enseña obediencia, sino emancipación; no predica sacrificio, sino justicia”. Y agregó: “La pedagogía de la historia nos invita a concebir el amor como práctica revolucionaria”, un condición que surge del cruce político y teológico feminista y queer”. 

🏳️‍🌈🏳️‍⚧️ Al respecto, nuestra Reverenda Obispa dijo: “El amor que Lohana Berkins llamaba “furia travesti”, el amor que Marx entendía como apertura al mundo, el amor que Freire reconocía como condición de la educación liberadora, el amor que los feminismos encarnan en sus luchas por vidas dignas. Ese amor, negado tantas veces, es hoy la energía vital que mueve la historia y la pedagogía de los pueblos”.

🏳️‍🌈🏳️‍⚧️ Antes de concluir su exposición, Guerreros invitó a la audiencia presente a “seguir aprendiendo a ser libres, a amar sin miedo, a vivir con dignidad”.