Sembrar la memoria, como un árbol que crece durante años, para que quienes nos siguen lo vean frondoso y grande.
Defender la memoria, es cuidar un relato, una herencia, el legado de todas las luchas, para quienes lleguen, busquen en sus hojas, en sus ramas, en sus raíces, siempre una respuesta al mundo en que vivimos.
Defendemos la memoria que cargamos en nuestros pies migrantes, que desde el rio Suchiate y Usumacinta y hasta el rio de la plata, nos une en una sola sangre, un solo grito.
Memoria verdad y justicia, son 30000, fue genocidio.
Defender la Memoria, es caminar junto a las madres y abuelas de plaza de mayo junto a las madres de desaparecidxs de todas las dictaduras de todas las infamias.
Desde esta tierra que quisieron arrasar sembramos memoria hasta que NUNCA MAS.